El buen pastor, da la vida por las ovejas

Dia 26 de abril, IV domingo de Pascua

52º Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones.oveja

Lectura del santo evangelio según san Juan 10, 11-18

En aquel tiempo, dijo Jesús:
– «Yo soy el buen Pastor. El buen pastor da la vida por las ovejas; el asalariado, que no es pastor ni dueño de las ovejas, ve venir al lobo, abandona las ovejas y huye; y el lobo hace estrago y las dispersa; y es que a un asalariado no le importan las ovejas.
Yo soy el buen Pastor, que conozco a las mías, y las mías me conocen, igual que el Padre me conoce, y yo conozco al Padre; yo doy mi vida por las ovejas.
Tengo, además, otras ovejas que no son de este redil; también a ésas las tengo que traer, y escucharán mi voz, y habrá un solo rebaño, un solo Pastor.
Por esto me ama el Padre, porque yo entrego mi vida para poder recuperarla. Nadie me la quita, sino que yo la entrego libremente. Tengo poder para entregarla y tengo poder para recuperarla: este mandato he recibido de mi Padre.»

REFLEXIÓN

Yo soy el pastor que cuida de sus ovejas

La polémica que se suscita ante la curación del ciego de nacimiento (Jn 9, 40-10, 21), le lleva a Jesús a manifestar un rasgo de su identidad y de su misión. Él nada tiene que ver con los jefes del pueblo que, habiendo recibido el encargo de guiarlo en nombre de Dios, se desvían de esa encomienda y usan de las prerrogativas y ventajas de su autoridad y la convierten en un ejercicio de arbitrariedad y abusos varios (cfr. Ez 34). El liderazgo de Jesús se aleja de la falsa bondad de los fariseos a quienes Jesús tacha de ciegos (Jn 9, 39). No son capaces de descubrir la belleza de su misión.

La bondad del Señor se encarna como belleza, y es como literalmente se describe Jesús: yo soy el pastor hermoso (kalós), porque no vivo como un peso mi dedicación, porque espontáneamente mi corazón va detrás de cada una de las ovejas dispersas o descarriadas, no sólo de Israel, sino las de todos los escenarios de la historia (Jn 10, 16). El pastor del amor hermoso, porque mi mirada no es dura ni exigente, sino que te conozco y reconozco en cada recoveco de tu itinerario y cada pliegue de tu corazón. Mi mirada no es fría, me conmuevo al pensar en el momento en que al fin dejes que te mire.

Yo entrego la vida libremente

Y es tan pleno este amor de Dios manifestado por Cristo, que “cuando se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos tal cual es” (1 Jn 3, 2). Nos salva la mirada de un Dios que se entrega sin aspavientos ni mala conciencia, sin reserva y sin vuelta. La vida del Hijo no se basa ni en el papel que interpreta ni en la función adquirida, sino en buscar nuestro bien hasta compartir su vida entera.

En este domingo del Buen Pastor, en que la Iglesia ora por todas la vocaciones de especial consagración en la Iglesia, pedimos porque no desempeñe este servicio como mercenarios o con la rutina que arrastra y nos hace mediocres, sino gastando amorosa y gozosamente nuestra vida a favor de nuestra comunidad. Domingo de Pascua, para salir del círculo vicioso de la propia justificación. Seguimos al único bello pastor, que es libre y pleno en su entrega.

No deberíamos olvidar esa palabra de Jesús. Sólo él tiene poder para recuperar la vida que entrega por los suyos. Ese es el mensaje de la Pascua. Pero todavía nos llaman la atención las referencias de Jesús a su Padre:

  • “El Padre me conoce y yo conozco al Padre”. Esa relación de mutuo conocimiento entre Jesús y su Padre indica su origen eterno, revela el estilo de su vida y nos ofrece la razón por la que ha podido revelarnos a su Padre.
  • “El Padre me ama porque yo entrego mi vida”. La generosidad de Jesús es fruto del amor que le une al Padre, pero, al mismo tiempo la entrega de Jesús a los hombres le hace merecedor del amor del Padre.
  • “Este mandato he recibido de mi Padre”. Una y otra vez Jesús había manifestado que había venido al mundo para cumplir la voluntad del Padre. Ahora nos manifiesta que la voluntad del Padre es que el Hijo entregue su vida por sus ovejas.

Señor Jesús, te reconocemos como la Piedra angular del edificio de nuestra fe y como el Pastor bueno que entrega su vida por sus ovejas.  Te alabamos por ello y te damos gracias. Amén. Aleluya

¿Estoy dispuesto a dejarme atraer, más allá de mis querencias, por el hermoso pastor, el dulce Jesús?.

 

JORNADA MUNDIAL DE ORACIÓN POR LAS VOCACIONES C0289_-_SU_-_Campana_JMOV_2015_estampa_ESPANOL_AF_INT_2_Página_1

ORACIÓN

Gracias, Señor, por aquellos a los que llamas
a servirte como sacerdotes,
encomendándoles el cuidado de su comunidad
y la evangelización de quienes no te conocen.
Gracias por hacerles ministros tuyos,
atentos a las necesidades de todos,
con afán de servir y compromiso misionero.
Gracias por quienes, movidos por tu Espíritu,
viven con radicalidad el Evangelio
como religiosos y religiosas.
Gracias por los que, con su oración comunitaria,
interceden sin cesar por toda la humanidad,
y por los que hacen de la actividad caritativa
un testimonio de tu amor y tu misericordia.
Gracias, Señor, por todas las vocaciones,
que, aquí y en los territorios de misión,
son signo de la vitalidad de tu Iglesia.
Que la libertad y entrega de sus vidas
siga mostrándonos que es bueno caminar contigo
para anunciar el Evangelio por toda la tierra.
Amén.

Los comentarios están cerrados.